En tu regimen de belleza no puedes olvidarte de humectar y consentir tu cuello. Ya es hora de que luzcas todos esos vestidos con strapless o con tirantes espagueti que tanto te gustan
Tal y como sucede con las manos y el rostro, la zona del cuello es una de las partes de nuestro cuerpo que más delatan la edad. Y no es posible que te la pases tapada con suéteres cuello de tortuga para ocultar ese complejo que puede ser resuelto si le das todo el cariño que se merece. Hay productos y trucos que te ayudan a atenuar, disimular y hasta desaparecer algunas de esas arrugas, sin necesidad de tener que recurrir al cirujano.
Toma en cuenta también que las arrugas en el cuello pueden ser causadas por varias razones: predisposición familiar, posturas inadecuadas, falta de cuidados, mala alimentación, fumar o poca oxigenación. Y se pueden encontrar esos surcos o pliegues en la piel como consecuencia de un proceso de envejecimiento fisiológico (general y por la edad) o prematuro, que es hasta 5 y 10 veces más rápido de lo habitual.
El tema de las arrugas ha sido, es y seguirá siendo uno de los más preocupantes entre las mujeres. No solamente por el lado estético, sino también porque nos confirma que el tiempo está pasando y que es inevitable que deje huellas. Debes entender que, aunque esta es una realidad, podemos hacerlas menos visibles o dilatarles su indeseable llegada.
El cuello flácido es una de las principales manifestaciones del envejecimiento cutáneo, por lo que antes de que te dé su señal de alarma, tienes que comenzar un tratamiento preventivo. Una de las claves que debes tomar muy en serio antes de que la piel comience a perder elasticidad y firmeza —a partir de los 30 años de edad— en la parte del escote y cuello, es la hidratación. Y no solamente nos referimos a beber el agua que nos recomiendan los expertos, sino a utilizar la que viene en productos. En ocasiones, muchas veces en la mayoría del tiempo, nos untamos crema hasta la barbilla, de ahí no pasamos. ¡Error! Hay que cubrir el cuello con el humectante que nos untamos en la mañana antes de maquillarnos y en las noches antes de dormir y después de habernos limpiado el cutis. Preferiblemente, busca aquellos que contengan vitamina C y retinol, pues ayudan a prevenir las señales del envejecimiento.
Y si te queda alguna duda, sencillamente cuida tu cuello de la misma manera que lo haces con tu rostro, para que puedas exhibirlo con esos vestidos
strapless o de tirantes espaguetti que tanto te gustan.
Tal y como sucede con las manos y el rostro, la zona del cuello es una de las partes de nuestro cuerpo que más delatan la edad. Y no es posible que te la pases tapada con suéteres cuello de tortuga para ocultar ese complejo que puede ser resuelto si le das todo el cariño que se merece. Hay productos y trucos que te ayudan a atenuar, disimular y hasta desaparecer algunas de esas arrugas, sin necesidad de tener que recurrir al cirujano.
Toma en cuenta también que las arrugas en el cuello pueden ser causadas por varias razones: predisposición familiar, posturas inadecuadas, falta de cuidados, mala alimentación, fumar o poca oxigenación. Y se pueden encontrar esos surcos o pliegues en la piel como consecuencia de un proceso de envejecimiento fisiológico (general y por la edad) o prematuro, que es hasta 5 y 10 veces más rápido de lo habitual.
El tema de las arrugas ha sido, es y seguirá siendo uno de los más preocupantes entre las mujeres. No solamente por el lado estético, sino también porque nos confirma que el tiempo está pasando y que es inevitable que deje huellas. Debes entender que, aunque esta es una realidad, podemos hacerlas menos visibles o dilatarles su indeseable llegada.
El cuello flácido es una de las principales manifestaciones del envejecimiento cutáneo, por lo que antes de que te dé su señal de alarma, tienes que comenzar un tratamiento preventivo. Una de las claves que debes tomar muy en serio antes de que la piel comience a perder elasticidad y firmeza —a partir de los 30 años de edad— en la parte del escote y cuello, es la hidratación. Y no solamente nos referimos a beber el agua que nos recomiendan los expertos, sino a utilizar la que viene en productos. En ocasiones, muchas veces en la mayoría del tiempo, nos untamos crema hasta la barbilla, de ahí no pasamos. ¡Error! Hay que cubrir el cuello con el humectante que nos untamos en la mañana antes de maquillarnos y en las noches antes de dormir y después de habernos limpiado el cutis. Preferiblemente, busca aquellos que contengan vitamina C y retinol, pues ayudan a prevenir las señales del envejecimiento.
Y si te queda alguna duda, sencillamente cuida tu cuello de la misma manera que lo haces con tu rostro, para que puedas exhibirlo con esos vestidos
strapless o de tirantes espaguetti que tanto te gustan.
Fuente:
Vanidades
14 de Agosto de 2008
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