Cada1 de junio, se celebra el Día Mundial de la Leche, instaurado hace ocho años por la Organización de Alimentos y Agricultura (FAO, su sigla en inglés) para incentivar la ingesta de productos lácteos, una de las principales fuentes de calcio, además de proteínas, zinc, hierro y vitaminas esenciales como la D y la B12. Una fecha propicia para preguntarse por el consumo de leche entre los chilenos. Según la Federación de Productores de Leche, nuestra ingesta alcanza en promedio una taza y media al día, ya sea en forma líquida o como postre, quesillo, yogur u otros derivados. Es decir, entre 125 y 128 litros al año, bastante lejos de lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. La nutricionista Nicole Braquenier, coordinadora académica de la carrera de Nutrición y Dietética de la Universidad de Viña del Mar, nos ilustra sobre la importancia de consumir leche y en qué cantidad. -¿Cuánto debemos consumir diariamente? -La Organización Mundial de la Salud recomienda 600 centímetros cúbicos, o sea, unos tres vasos por día. Puedes alcanzar este consumo con dos vasos de leche y un yogur, por ejemplo, o supliendo la leche líquida que no tomes con quesillo y otros derivados. Por eso, estamos muy por debajo de lo aconsejado internacionalmente. -Los flanes, postres de leche y similares, ¿sustituyen efectivamente a la leche? -Contienen leche, por cierto, pero hay que ver su aporte de calcio. Además, tienen mucha azúcar, y esto no pasa en la leche líquida o en el quesillo. -Se suele educar mucho a los niños sobre lo importante que es consumir leche. ¿Por qué a los adultos ya no se les recomienda tanto?, ¿pueden consumir menos? -Los adultos deben tomar tanta leche como los niños. Lo que sucede es que el calcio se absorbe hasta los 20 años, entonces a los niños se les recomienda con más fuerza tomar leche en las cantidades necesarias para formar su estructura ósea. Y una vez que ésta se forma, hay que seguir tomando leche en las mismas cantidades para mantenerla. El calcio, no lo olvidemos, es el componente básico de huesos y dientes, y es necesario para la contracción muscular. -¿Qué le ocurre a las personas que apenas consumen leche o derechamente no consumen? -Enferman de osteoporosis, que es la principal afección por falta de calcio. Su masa ósea se debilita y esto les puede producir fácilmente fracturas y otros problemas. La osteoporosis es crónica, por lo que no es un asunto menor esto de tomar o no leche. Además, si el consumo es muy bajo, se afecta la salud dental. -Se recomienda mucho más la leche descremada y, en menor medida, la semidescremada. ¿Es beneficiosa, en algún caso, la leche entera? -La leche entera sigue existiendo porque es más barata, aunque no mucho más, y porque es más sabrosa para quienes la consumen. Pero tiene grasa y es menos saludable que la descremada. Bajo ningún punto de vista es recomendable. -En el mercado han aparecido, en los últimos años, leches cultivadas, extra-calcio y otras con supuestos beneficios adicionales. ¿Son realmente beneficiosas o la publicidad les da atributos que no tienen? -Efectivamente la extra-calcio proporciona más calcio que la normal, por lo cual es buena para quienes no gustan mucho de la leche, ya que con menos cantidad de centímetros cúbicos tienen el mismo aporte en calcio. Las cultivadas tienen bacterias propias del cuerpo humano y las ‘biobalance’ tienen fibras adicionadas; estas dos últimas mejoran la digestión de quienes las consumen. En general, la publicidad e los lácteos está correctamente planteada. Edición: Universia / RR Fuente: Universidad de Viña del Mar
Fuente:
Universia
02/06/09
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