La nutrición juega un rol muy importante para las personas que tienen enfermedades hepáticas porque el hígado cumple variadas funciones dentro del cuerpo, trabajando constantemente con nutrientes.
Al hígado se le conoce como el laboratorio del cuerpo por lo que, cuando se tiene una enfermedad relacionada a este órgano, la alimentación puede mantener o mejorar las funciones que realiza.
Para la nutricionista Sara Abu-Sabbah, de 'Salud en RPP' existen cuatro lineamientos básicos con los que se debe trabajar para consolidar una buena nutrición en personas que sufren de problemas hepáticos.
"Primero, la alimentación tiene que ser vista de manera individual porque algo que le funciona a una persona, no necesariamente le va a funcionar a todos", dijo la nutricionista. "Segundo, hay que ver si el paciente está en el peso adecuado, sobre todo en problemas hepáticos", añadió.Los pacientes con enfermedades relacionadas al hígado no necesitan reducir el número de calorías que consumen necesariamente y deberán ingerir alimentos más enriquecidos con respecto al aporte de proteínas.
Por último, la grasa es un nutriente que va a afectar al hígado si se tiene una enfermedad muy severa, pero va a jugar un papel importante. Las personas con fallas hepáticas suelen tener falta de apetito y hasta desarrollar anorexia, por lo que la grasa le puede dar al alimento un poco más de gusto.
Para ello, la nutricionista recomendó consumir grasa a tolerancia del paciente y mejor si se ingiere cruda directamente en el plato.
Fuente:
RPP Noticia
13 de Junio de 2008
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