Hace pocos días se realizó en Córdoba una conferencia sobre estrés y alimentación, donde se concluyó que cuando se padece estrés es seguro que se establezcan relaciones peligrosas con la comida. Hay alimentos que favorecen el estado de angustia y excitación, y otros que los previenen. FABIANA JUÁREZ El estrés es la manera en que una persona reacciona (sentimientos y acciones) ante los eventos que pueden provocar cambios en la vida. Se produce cuando estos sucesos, ya sean de orden físico o psíquico, superan la capacidad para afrontarlos y provocan un desequilibrio interno. Cuando esto ocurre se comienzan a utilizar tácticas para combatir el agente estresante y regresar al estado normal, y muchísimas veces esas "estrategias" se relacionan con la comida.A estas conclusión se arribó durante la conferencia de salud realizada hace dos semanas en la ciudad de Córdoba por la Sociedad de Medicina del Estrés de esa provincia. "Desde la niñez la comida se utiliza para distintos fines -comenta la nutricionista Noemí Martín de Uzair, quien participó de la conferencia-. El verdadero problema es cuando se instala en nosotros el hábito de comer por un impulso emotivo y esto hace que sea imposible realizar una alimentación saludable. Lo principal es darnos cuenta que ésto nos está ocurriendo y buscar ayuda en un especialista en nutrición".En situaciones estresantes las personas no sienten apetito o no se imponen límites a la hora de comer. De esta manera el estrés provoca un aumento en las necesidades de nutrientes y agota la reserva de energía del cuerpo. A esto hay que sumarle que, además, hay alimentos que favorecen los estados emotivos negativos. Es por eso que los especialistas, durante la conferencia, elaboraron un decálogo con los principios básicos que debe tener la alimentación para prevenir y combatir el estrés:-Comenzar el día con un buen desayuno.-Comer de forma equilibrada es fundamental para mantener en orden cuerpo y mente, evitando que el estrés afecte órganos y funciones. -Seguir las recomendaciones de un plan suficiente y equilibrado para asegurar que no se produzca ningún déficit de nutrientes y mantener un peso saludable.-Respetar los horarios de las comidas, comer a horas regulares, para evitar descensos bruscos en el nivel de glucosa en sangre.-Comer despacio, tranquilo y masticando bien los alimentos.-El magnesio es un mineral esencial para la resistencia contra el estrés y la ansiedad. Su deficiencia se asocia a excitabilidad y desórdenes emocionales. Para obtenerlo consumir alcauciles, espinacas, banana y germen de trigo.-El ácido pantoténico (elemento del Complejo B) ayuda a prevenir el estrés porque tiene un fuerte efecto en las glándulas adrenales y el sistema inmunológico. Además, la deficiencia de vitaminas del Complejo B, especialmente la tiamina, se asocia con enfermedades mentales y promueve la depresión. Las principales fuentes de tiamina son el arroz, pescado, semillas de girasol, cereales enriquecidos, legumbres y productos integrales. Su consumo es imprescindible para conservar el equilibrio nervioso y el funcionamiento cerebral.-Aumentar el consumo de triptófano, aminoácido que en el cerebro es precursor del neurotransmisor serotonina, el cual se cree que tiene un efecto sedante. Se consigue en los panes, pastas y cereales integrales.-La vitamina A y los minerales calcio y potasio reducen la sensación de irritabilidad y ansiedad, y ayudan a prevenir los cambios causados por el estrés. Consumir alimentos que contienen estos nutrimentos: vegetales de color amarillo y verde intenso, frutas, granos, leche y sus derivados. -El zinc ayuda a atacar los estados depresivos. Si se come bastantes frutas y vegetales frescos se obtendrá este importante mineral. -El trigo en sus distintas presentaciones tiene un alto contenido de niacina y pridoxina, sustancias que también son requeridas para las reacciones biológicas que evitan la depresión.-Consumir demasiada cafeína tiende a causar insomnio, mal humor, dolor de cabeza y diarrea. Estos síntomas causan estrés adicional, por lo que se debe evitar su ingesta. La cafeína se encuentra principalmente en el café y las bebidas cola.-No consumir alimentos tóxicos causantes de estrés, como son la sal en exceso, las salsas y las bebidas alcohólicas.-Evitar el consumo de tabaco, que, además de no ser alimento, es un destructor de las reservas de vitaminas, especialmente de la C.
Fuente:
Diario de Cuyo.com
5 de Noviembre de 2007
http://www.diariodecuyo.com.ar/home/new_noticia.php?noticia_id=250565
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