Algunas veces los productos de belleza tienen precios prohibitivos, y no todos los bolsillos pueden acceder a ellos. Pero para mantener una piel tersa y firme, y que tu rostro brille con luz propia no es necesario tener un elevado presupuesto. Recuerda que nuestras abuelas estaban guapísimas en su juventud y por aquel entonces el mercado de los cosméticos era mucho más arcaico e inaccesible.
Opta por los remedios caseros que a continuación te proponemos:
Para hidratar tu piel:
Mezclar en un recipiente la pulpa de un maracuyá, una cucharada de miel e infusión de manzanilla. Aplicar en el rostro con una borla de algodón, deja actuar durante 15 o 20 minutos y retíralo con abundante agua.
Otra posibilidad es batir la yema de un huevo, añadir una cucharadita de aceite de oliva y otra de miel. Aplicar la mezcla en el rostro bien limpio y mantenerla durante 15 minutos. Retirar con agua tibia y hacer un último enjuague con agua fría.
Para eliminar las ojeras:
Puedes utilizar el sencillo pero eficaz método de las rodajas de pepino sobre los ojos. Si deseas disminuir la hinchazón y el cansancio hierve bolsitas de manzanilla o camomila y cuando estén frías colócalas encima de tus ojos.
Para tonificar tu piel:
Solo tienes que licuar una taza de nata, una cucharada de miel, tres hojas de lechuga limpia y dos de avena en polvo. Aplicar la crema espesa por todo el rostro, dejar actuar unos minutos y retirar con agua fría.
Para eliminar los puntos negros:
Frotar una vez a la semana tu piel con bicarbonato mientras te duchas. Los gránulos de bicarbonato actúan como exfoliantes, y su composición limpia los cierra y limpia los poros.
Para desmaquillar tu rostro:
Partir una fresa por la mitad y aplicar con ella yogur o leche por todo la cara, realizando movimientos circulares. Después, retíralo con agua.
Para eliminar el acné:
Rayar la piel de una naranja y mezclar con un yogur natural y harina de avena, hasta conseguir una textura cremosa. Aplicarlo 2 veces por semana.
Para reducir las arrugas:
Batir una clara a punto de nieve, cuando esté lista echar una cucharadita de miel. Añadir a la mezcla unas veinte gotas de aceite de almendras y mezclar todo muy bien. Aplicar en el rostro y en el cuello durante unos 20 o 25 minutos. Pasado este tiempo, retirar con agua, hasta que quede totalmente eliminada.
Es aconsejable aplicar esta mascarilla una vez por semana.
Para que tu cabello gane brillo:
En un recipiente mezclar una cucharada de zumo de pepinillos, una de zumo de aguacate y un huevo a punto de nieve. Echar en el pelo húmedo y dejar actuar unos minutos. Aclarar abundantemente con agua.
Para reducir la grasa en el rostro:
Poner en un recipiente una porción de queso fresco desnatado, una cucharada de leche desnatada, el zumo de medio limón, y una cucharada de miel. Batir la mezcla con la batidora y aplicar sobre la piel perfectamente limpia. Dejar actuar durante unos 15 o 20 minutos y lo retirar con agua fresca.
Opta por los remedios caseros que a continuación te proponemos:
Para hidratar tu piel:
Mezclar en un recipiente la pulpa de un maracuyá, una cucharada de miel e infusión de manzanilla. Aplicar en el rostro con una borla de algodón, deja actuar durante 15 o 20 minutos y retíralo con abundante agua.
Otra posibilidad es batir la yema de un huevo, añadir una cucharadita de aceite de oliva y otra de miel. Aplicar la mezcla en el rostro bien limpio y mantenerla durante 15 minutos. Retirar con agua tibia y hacer un último enjuague con agua fría.
Para eliminar las ojeras:
Puedes utilizar el sencillo pero eficaz método de las rodajas de pepino sobre los ojos. Si deseas disminuir la hinchazón y el cansancio hierve bolsitas de manzanilla o camomila y cuando estén frías colócalas encima de tus ojos.
Para tonificar tu piel:
Solo tienes que licuar una taza de nata, una cucharada de miel, tres hojas de lechuga limpia y dos de avena en polvo. Aplicar la crema espesa por todo el rostro, dejar actuar unos minutos y retirar con agua fría.
Para eliminar los puntos negros:
Frotar una vez a la semana tu piel con bicarbonato mientras te duchas. Los gránulos de bicarbonato actúan como exfoliantes, y su composición limpia los cierra y limpia los poros.
Para desmaquillar tu rostro:
Partir una fresa por la mitad y aplicar con ella yogur o leche por todo la cara, realizando movimientos circulares. Después, retíralo con agua.
Para eliminar el acné:
Rayar la piel de una naranja y mezclar con un yogur natural y harina de avena, hasta conseguir una textura cremosa. Aplicarlo 2 veces por semana.
Para reducir las arrugas:
Batir una clara a punto de nieve, cuando esté lista echar una cucharadita de miel. Añadir a la mezcla unas veinte gotas de aceite de almendras y mezclar todo muy bien. Aplicar en el rostro y en el cuello durante unos 20 o 25 minutos. Pasado este tiempo, retirar con agua, hasta que quede totalmente eliminada.
Es aconsejable aplicar esta mascarilla una vez por semana.
Para que tu cabello gane brillo:
En un recipiente mezclar una cucharada de zumo de pepinillos, una de zumo de aguacate y un huevo a punto de nieve. Echar en el pelo húmedo y dejar actuar unos minutos. Aclarar abundantemente con agua.
Para reducir la grasa en el rostro:
Poner en un recipiente una porción de queso fresco desnatado, una cucharada de leche desnatada, el zumo de medio limón, y una cucharada de miel. Batir la mezcla con la batidora y aplicar sobre la piel perfectamente limpia. Dejar actuar durante unos 15 o 20 minutos y lo retirar con agua fresca.
Fuente:
Mujer Tendencias
20/07/09
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