Cada vez son más las personas que se preocupan por su peso ya sea por salud, por mejorar su forma física o por pura estética. Esto se ve reflejado en el aumento de clínicas de adelgazamiento que ofrecen el servicio de dietistas, endocrinólogos, cirujanos y otros profesionales para ayudar a perder esos kilos de más. El problema es que entre las opciones que existen en este campo, hay muchas que se venden como remedios milagrosos cuando en realidad no solucionan nada.
Luis Miguel García González, experto en nutrición, en una entrevista con elEconomista.es advirtió que estos tratamientos vendidos como el remedio definitivo, en realidad tienen una efectividad escasa o nula: "Si realmente existiera un remedio milagroso hubiera salido en EEUU y allí tienen un serio problema con la obesidad", dijo con humor.
Soluciones engañosas
Los tratamientos de bandas calientes para hacer sudar "lo único que causan es una pérdida de líquidos que se recuperarán enseguida", explicó. Las bandas frías que pretenden un aumento de gasto calórico del organismo para compensar la disminución de temperatura "tampoco ofrecen resultados reales" aseguró el experto. En cuanto a la mesoterapia nos explicó que "tiene buenos resulatados para combatir la celulitis o la piel de naranja, pero no para perder peso".
En cuanto a los tratamientos farmacológicos, advirtió sobre los 'cócteles de medicamentos' que ofrecen en algunas clínicas: "estos combinados no son buenos para la salud, hay posibilidades de que te sienten muy mal". Normalmente están compuestos de medicamentos tiroideos, ansiolíticos para contrarrestar sus efectos secundarios, diuréticos y muchos otros. Tampoco son buenos para la salud los medicamentos inhibidores del apetito por sus efectos secundarios.
Los medicamentos que reducen la absorción de grasas no son tan nocivos según el experto, pero hay que tener cuidado porque "puede provocar anemias al no poderse absorber la vitaminas liposolubles".
El principal problema de estos tratamientos es que aunque se consiga adelgazar, realmente no se ha solucionado el problema. Hay que cambiar lo hábitos alimenticios y vitales de la persona.
Habitos equilibrados
El mejor sistema para adelgazar de forma sana, duradera y eficaz, aunque no el menos costoso, es el de educar al organismo. Una persona no debe tener ganas de comer cuando tiene sus necesidades cubiertas. ¿Cómo se consigue el equilibrio del organismo? Hay que comer lo que nuestro cuerpo necesita y al principio hay que aguantar las demandas excesivas de nutrientes. Pero esto dura solo un tiempo, una vez que el organismo se acostumbra ya no hay que pasar malos ratos soportando el hambre. Alguien que se ha estado sobrealimentando durante un tiempo lo tiene más difícil porque su cuerpo esta más desequilibrado. Le exige una cantidad de comida superior a la que necesita, por lo que tiende a seguir sobrealimentándose y engordando.
Un cuerpo adulto suele necesitar entre 1500 y 2000 calorías, con un ejercicio moderado, pero para saber esto de forma precisa se pueden realizar unos cálculos, que dan una idea de los alimentos que se necesitan para estar sano. Un experto puede ayudar a saber cual es el consumo que tiene nuestro organismo y recomendar la dieta más adecuada.
El ejercicio y el equilibrio
El ejercicio también es importante para estar equilibrado. Esto se debe a que el cuerpo humano esta preparado para funcionar correctamente sometido a actividad física. O dicho de otra forma, necesita ejercicio para poder realizar sus funciones básicas correctamente.
Según L. Miguel García "el ejercicio debe ser moderado y progresivo, además es bueno para mantenernos ocupados y no picar". Realizar ejercicios en casa o salir a correr o andar son costumbres muy recomendables. Pero no hay que olvidar que los deportes más entretenidos como el tenis, baloncesto o el futbol sala no deberían ser solo competencia de los más jovenes. Hacer deporte por diversión siempre será un incentivo para tener la actividad física que necesitamos.
Luis Miguel García González, experto en nutrición, en una entrevista con elEconomista.es advirtió que estos tratamientos vendidos como el remedio definitivo, en realidad tienen una efectividad escasa o nula: "Si realmente existiera un remedio milagroso hubiera salido en EEUU y allí tienen un serio problema con la obesidad", dijo con humor.
Soluciones engañosas
Los tratamientos de bandas calientes para hacer sudar "lo único que causan es una pérdida de líquidos que se recuperarán enseguida", explicó. Las bandas frías que pretenden un aumento de gasto calórico del organismo para compensar la disminución de temperatura "tampoco ofrecen resultados reales" aseguró el experto. En cuanto a la mesoterapia nos explicó que "tiene buenos resulatados para combatir la celulitis o la piel de naranja, pero no para perder peso".
En cuanto a los tratamientos farmacológicos, advirtió sobre los 'cócteles de medicamentos' que ofrecen en algunas clínicas: "estos combinados no son buenos para la salud, hay posibilidades de que te sienten muy mal". Normalmente están compuestos de medicamentos tiroideos, ansiolíticos para contrarrestar sus efectos secundarios, diuréticos y muchos otros. Tampoco son buenos para la salud los medicamentos inhibidores del apetito por sus efectos secundarios.
Los medicamentos que reducen la absorción de grasas no son tan nocivos según el experto, pero hay que tener cuidado porque "puede provocar anemias al no poderse absorber la vitaminas liposolubles".
El principal problema de estos tratamientos es que aunque se consiga adelgazar, realmente no se ha solucionado el problema. Hay que cambiar lo hábitos alimenticios y vitales de la persona.
Habitos equilibrados
El mejor sistema para adelgazar de forma sana, duradera y eficaz, aunque no el menos costoso, es el de educar al organismo. Una persona no debe tener ganas de comer cuando tiene sus necesidades cubiertas. ¿Cómo se consigue el equilibrio del organismo? Hay que comer lo que nuestro cuerpo necesita y al principio hay que aguantar las demandas excesivas de nutrientes. Pero esto dura solo un tiempo, una vez que el organismo se acostumbra ya no hay que pasar malos ratos soportando el hambre. Alguien que se ha estado sobrealimentando durante un tiempo lo tiene más difícil porque su cuerpo esta más desequilibrado. Le exige una cantidad de comida superior a la que necesita, por lo que tiende a seguir sobrealimentándose y engordando.
Un cuerpo adulto suele necesitar entre 1500 y 2000 calorías, con un ejercicio moderado, pero para saber esto de forma precisa se pueden realizar unos cálculos, que dan una idea de los alimentos que se necesitan para estar sano. Un experto puede ayudar a saber cual es el consumo que tiene nuestro organismo y recomendar la dieta más adecuada.
El ejercicio y el equilibrio
El ejercicio también es importante para estar equilibrado. Esto se debe a que el cuerpo humano esta preparado para funcionar correctamente sometido a actividad física. O dicho de otra forma, necesita ejercicio para poder realizar sus funciones básicas correctamente.
Según L. Miguel García "el ejercicio debe ser moderado y progresivo, además es bueno para mantenernos ocupados y no picar". Realizar ejercicios en casa o salir a correr o andar son costumbres muy recomendables. Pero no hay que olvidar que los deportes más entretenidos como el tenis, baloncesto o el futbol sala no deberían ser solo competencia de los más jovenes. Hacer deporte por diversión siempre será un incentivo para tener la actividad física que necesitamos.
Fuente:
Ecoaula.es
22 de Enero de 2008
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