Es de sobra conocido que tomar ácido fólico antes del embarazo resulta esencial para prevenir la aparición de malformaciones congénitas, como la espina bífida o la anencefalia. Pero esta vitamina presenta también resultados espectaculares a la hora de prevenir el nacimiento de niños prematuros, según las conclusiones del mayor estudio realizado hasta la fecha en EEUU sobre esta cuestión, en el que han participado un total de 38.033 mujeres.
La investigación, que se presenta hoy en Dallas en la reunión anual de la Sociedad de Medicina Materno-Infantil estadounidense, revela que en mujeres que tomaban suplementos de ácido fólico desde un año antes de la concepción, las posibilidades de tener un niño entre la semana 28 y 32 se reducían en un 50%.
El efecto de estos suplementos fue aún mayor a la hora de evitar el nacimiento antes de término de niños todavía más prematuros (nacidos entre la semana 20 y la 28), con una tasa de prematuridad de un 70% menor. Nacer tan pronto conlleva elevados riesgos de salud para el bebé, como parálisis cerebral, retraso mental, enfermedad pulmonar crónica o o ceguera.
El director médico de la organización norteamericana de salud infantil March of Dimes , Alan Fleischman, considera que ahora tiene todavía más sentido la recomendación de que las mujeres en edad fértil consuman 400 microgramos de ácido fólico al día antes de quedarse embarazadas.
“Esperamos que esta investigación nos sirva para espolear a los profesionales sanitarios para que insistan a sus pacientes a introducir los suplementos de ácido fólico en su rutina diaria como una medida simple para tener un niño sano el día de mañana”, agrega Fleischman.
Por si fuera poco, la presidenta de la Sociedad norteamericana de Salud Materno-Infantil, Katharine Wenstrom, destaca que a estos beneficios hay que añadir los resultados de estudios anteriores que indicaban que la ingesta de folatos era también beneficiosa para prevenir ictus y enfermedad cardiovascular en adultos. “Esta es la razón por la que todo el mundo, incluyendo los hombres, deberían tomarlo”, agrega.
Por su parte, el miembro de la Asociación Española de Pediatría y jefe del Servicio de Neonatología del Hospital Clínico de Valencia, Carlos Paredes, destacó que uno de los actuales retos de la neonatología es la prevención de la prematuridad, y consideró que la mejor manera de abordarlo es a través de un mejor control del embarazo.
La investigación, que se presenta hoy en Dallas en la reunión anual de la Sociedad de Medicina Materno-Infantil estadounidense, revela que en mujeres que tomaban suplementos de ácido fólico desde un año antes de la concepción, las posibilidades de tener un niño entre la semana 28 y 32 se reducían en un 50%.
El efecto de estos suplementos fue aún mayor a la hora de evitar el nacimiento antes de término de niños todavía más prematuros (nacidos entre la semana 20 y la 28), con una tasa de prematuridad de un 70% menor. Nacer tan pronto conlleva elevados riesgos de salud para el bebé, como parálisis cerebral, retraso mental, enfermedad pulmonar crónica o o ceguera.
El director médico de la organización norteamericana de salud infantil March of Dimes , Alan Fleischman, considera que ahora tiene todavía más sentido la recomendación de que las mujeres en edad fértil consuman 400 microgramos de ácido fólico al día antes de quedarse embarazadas.
“Esperamos que esta investigación nos sirva para espolear a los profesionales sanitarios para que insistan a sus pacientes a introducir los suplementos de ácido fólico en su rutina diaria como una medida simple para tener un niño sano el día de mañana”, agrega Fleischman.
Por si fuera poco, la presidenta de la Sociedad norteamericana de Salud Materno-Infantil, Katharine Wenstrom, destaca que a estos beneficios hay que añadir los resultados de estudios anteriores que indicaban que la ingesta de folatos era también beneficiosa para prevenir ictus y enfermedad cardiovascular en adultos. “Esta es la razón por la que todo el mundo, incluyendo los hombres, deberían tomarlo”, agrega.
Por su parte, el miembro de la Asociación Española de Pediatría y jefe del Servicio de Neonatología del Hospital Clínico de Valencia, Carlos Paredes, destacó que uno de los actuales retos de la neonatología es la prevención de la prematuridad, y consideró que la mejor manera de abordarlo es a través de un mejor control del embarazo.
Fuente:
Publico.es
31 de Enero de 2008
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