Los programas del gobierno capitalino pierden efectividad porque los fumadores se niegan a reconocer su adicción, y se permite que establecimientos violen la normatividad
EDITH MARTÍNEZ El Universal Viernes 24 de octubre de 2008
edith.martinez@eluniversal.com.mx
Los capitalinos se resisten a dejar de fumar.
La muestra es la falta de asistentes a las 19 clínicas de tabaquismo instaladas en el Distrito Federal por la Secretaría de Salud lo-cal (Salud-DF).
El problema es que las personas se niegan a reconocerse como fumadores y a aceptar que tienen adicción al tabaco, explicó Óscar Vázquez, titular del programa de tabaquismo de esa dependencia.
La inasistencia se suma a las deserciones de aquellos que decidieron dejar de fumar pero abandonaron el tratamiento, y a las violaciones a la ley que cometen algunos establecimientos al permitir fumar en el interior de sus instalaciones.
El 3 de abril entró en vigor la Ley de Protección a la Salud de los no Fumadores y las reformas a la Ley de Establecimientos Mercantiles, que prohíben el consumo de tabaco dentro de giros comerciales y espacios públicos cerrados.
Óscar Vázquez dijo que con la tragedia en el New’s Divine —el 20 de junio— quedó descubierta la carencia de verificaciones en lugares de reunión, principalmente de jóvenes, lo que debilita las acciones de promoción a la salud.
La dependencia recibe quejas telefónicas de estos lugares pero no puede sancionarlos, por lo que turna las demandas a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal y a las delegaciones para que apliquen los castigos.
Sin embargo, muchas veces las faltas se pasan por alto, y “tendremos que hacer algo” para solucionar la situación.
Pasan por alto la ayuda de profesionales
En la ciudad de México hay casi 2 millones de fumadores, y desde que entró en vigor la llamada ley antitabaco, la Secretaría de Salud de la capital está obligada a promocionar los beneficios de dejar esta adicción y dar ayuda profesional.
Sin embargo, en medio año sólo se atendió a 2 mil 402 fumadores en las 19 clínicas, según informó el 4 de octubre Armando Ahued, secretario de Salud en la capital, en su comparecencia ante la Asamblea Legislativa del DF.
Aun así, Óscar Vázquez insistió en que se lograron objetivos como el respeto a los lugares cerrados y que los fumadores salgan a la calle a fumar y la protección de meseros de aspirarlo mientras trabajan.
Salud-DF también realiza visitas a escuelas para persuadir a los jóvenes para que dejen de fumar. En estas actividades la dependencia encontró que 29% de las adolescentes cree que al consumir tabaco tiene mayor posibilidad “de ligarse a un galán”.
De ahí que la preocupación que continúa en el sector salud capitalino sea encontrar la manera de incidir en la cultura de los ciudadanos para que se acerquen a los servicios y decidan dejar de fumar, o bien evitar que lo hagan.
“En los centros de salud se dan pláticas de tabaquismo a la gente que espera consultas, pero cuando se les pregunta si están dispuestas a dejar el cigarro, dicen: ‘Estaría bien, pero ahorita no’”.
Por ello, los centros de salud que cuentan con las clínicas para dejar de fumar ofrecen servicio sólo algunos días de la semana.
“No tiene sentido tener un equipo multidisciplinario todos los días si no se ocupa. Por eso tuvimos que establecer algunos días para las consultas”, explicó el funcionario.
Fuente:
El Universal
27 de Octubre de 2008
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