“Muchas de las lesiones y riesgos para la salud que los niños confrontan en Halloween podrían ser evitados si sus padres los supervisan con mucha más atención durante los recorridos de regalo o travesura (trick or treat)”, aseguró el doctor Richard F. Daines, Comisionado de salud del estado de Nueva York.
Otros peligros están relacionados con los disfraces que usan y las golosinas que les regalan. El Departamento de Salud de Nueva York aconseja:
Asegurarse de que al menos un adulto supervise a los menores de 12 años.
Planear y evaluar la ruta de recorrido, establecer una hora de regreso, y abastecerse de linternas.
Advertir a los niños que nunca se separen del grupo y recorrer sólo vecindarios conocidos.
Recalcar a los menores que sólo se acerquen a casas o apartamentos que estén bien iluminados y que nunca entren en una casa de un desconocido.
Los niños no deben probar las golosinas hasta que no regresen a casa y los padres las hayan inspeccionado.
Los disfraces deben estar fabricados con materiales no inflamables debidamente aprobados.
Los disfraces deben ser lo suficientemente sueltos para poder usar debajo ropa cálida pero ser lo suficientemente cortos para que los niños se tropiecen en ellos y caigan al suelo.
Las máscaras y accesorios no deben obstruir la visión del niño y deben tener aperturas para ojos, nariz y boca.
Otros peligros están relacionados con los disfraces que usan y las golosinas que les regalan. El Departamento de Salud de Nueva York aconseja:
Asegurarse de que al menos un adulto supervise a los menores de 12 años.
Planear y evaluar la ruta de recorrido, establecer una hora de regreso, y abastecerse de linternas.
Advertir a los niños que nunca se separen del grupo y recorrer sólo vecindarios conocidos.
Recalcar a los menores que sólo se acerquen a casas o apartamentos que estén bien iluminados y que nunca entren en una casa de un desconocido.
Los niños no deben probar las golosinas hasta que no regresen a casa y los padres las hayan inspeccionado.
Los disfraces deben estar fabricados con materiales no inflamables debidamente aprobados.
Los disfraces deben ser lo suficientemente sueltos para poder usar debajo ropa cálida pero ser lo suficientemente cortos para que los niños se tropiecen en ellos y caigan al suelo.
Las máscaras y accesorios no deben obstruir la visión del niño y deben tener aperturas para ojos, nariz y boca.
Fuente:
Impre.com
28 de Octubre de 2008
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