Miércoles 18 de Julio de 2007
Fuente :La Segunda Internet
Durante los cursos del Pre Congreso Chileno de Salud Pública realizado el martes 17 de julio en la Facultad de Enfermería de la Universidad Andrés Bello se analizaron en profundidad los principales problemas que afectan la salud de los escolares del país, en particular, el referido a los niveles de obesidad, que han alarmado tanto a las autoridades, como a la población. Bajo el lema "Salud Escolar, en el Marco de la Reforma de Salud", el precongreso reunió representantes de la UNICEF, de la Junta de Nacional de Auxilio Escolar y Becas (JUNAEB), del Instituto de de Nutrición y Tecnología de los Alimentos (INTA), del Ministerio de Salud, la Corporación Municipal de La Florida, la Asociación de Enfermeras Inter Escolares y la Facultad de Enfermería de la Universidad Andrés Bello. En la realización del precongreso, la doctora Sonia Olivares del INTA comentó el estudio "Alimentación saludable. Situación de los escolares chilenos" aplicado a niños y niñas de distintos estratos socioeconómicos de entre 8 y 13 años el 2003. En este análisis se destaca la importante influencia de la publicidad y el marketing en los hábitos alimenticios de los menores, quienes se enfrentan a las tentaciones de la comida poco saludable y con alto contenido graso que bombardean la televisión. Al mismo tiempo, comentó que las largas horas frente al computador y televisor se traducen en una falta de actividad física y predominio del sedentarismo. Esta realidad es conocida por las empresas de publicidad, aprovechada para exponer sus productos ante los niños y así lograr su consumo. Sin duda, la falta de control por parte de los padres se suma a este problema que cada día afecta de forma más grave a los pequeños. Presión social Otro cambio que ha sido perjudicial para la salud de los niños y de las personas en general, ha sido el aumento de las porciones. Años atrás los platos eran más pequeños, ahora las raciones son notablemente mayores, sobretodo cuando se trata de comida rápida. El estudio también arrojó que los escolares, durante los recreos, prefieren comer snacks, y que son, justamente ellos, los que más atención ponen a los comerciales televisados, por lo que recuerdan, los productos que en este caso son más perjudiciales para su salud. Adicionalmente, los niños obesos acusan que son incentivados por los propios compañeros de curso para comer más. Por ejemplo, si llevan una manzana, el resto le convida de su colación porque lo molestan diciendo, "guatón toma o vas a quedar con hambre", cuenta la doctora Olivares. Estas situaciones que se repiten, son una desmotivación para que los niños se esfuercen en hacer una dieta y logren un peso saludable.
Fuente:
La Segunda Online
18 de Julio de 2007
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