¿Por qué algunos días cuando me miro al espejo por la mañana siento que me veo mal?
Todas hemos sentido eso. A veces nos despertamos y preferimos ponernos una bolsa de papel en la cabeza antes que salir así.
Esto nos sucede a pesar de saber que nuestra cara no ha cambiado de la noche a la mañana. Este tipo de situaciones nos hacen darnos cuenta que se trata de un sentimiento que se relaciona directamente con nuestro estado de ánimo, de cómo nos sentimos en ese momento.
1 Aunque pueda sonar quizá repetido y ya lo has escuchado antes, recuerda que tu belleza externa es un reflejo de su belleza interior, por eso es que la belleza interna es la que importa. Así que haz el esfuerzo de que te guste tu ‘look’. Cuando comienza a importarte cómo te ves, te está empieza a importar cómo estás tú, como persona.
2 En vez de concentrarte en ver tus defectos, mira y enfócate en todo lo positivo. Cualquier cosa buena, bonita o positiva que tengas, y todas las tenemos, tus labios, tu nariz, tus ojos, tu rostro, se dan un tiempo para mirarse y apreciarse.
3. Busca tu foto favorita. Rebusca entre tus fotos, ya sean en la computadora o una foto clásica, hasta encontrar en la que salgas mejor. Dale una buena mirada. Pronto te preguntarás cómo es que te estabas sintiendo tan fea.
4. Aunque es invierno, disfruta de algunos rayos, aunque la neblina haga parecer que los rayos no pasan, ese rayito de sol te encuentra. Se sabe que los rayos de sol animan el estado de ánimo. De hecho, en los países europeos del norte, donde el sol brilla por menos tiempo y rara vez, las personas toman una terapia de luz para combatir la depresión. Pero recuerda siempre que, si el sol está fuerte, debes usar un poco de bloqueador.
5. Mima a tu piel regularmente, úntala con alguna crema humectante que tenga un olor suave y que te guste. Cuando te das un tiempo para mimar tu cuerpo, se nota. Dale a tu piel un cuidado diario y usa una crema facial para que la piel de tu rostro se suavice. Terra Networks
Fuente:
Terra
06/08/09
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