Las bebidas elaboradas a base de soya luchan por posicionarse en el mercado y aprovechar la ola de consumidores que buscan productos saludables, razón por la cual las empresas dedicadas a los alimentos y bebidas tienen una línea de productos para atacar este nicho.
Starbucks, por ejemplo, ya ofrece café con leche de soya cuyo precio promedio es de 33 pesos; Ades, de Unilever, tiene ocho presentaciones para sus bebidas; mientras Sigma lanzó al mercado la marca Solé, que cuenta con leche, jugos y bebidas de soya light.
Por su parte, Jugos del Valle decidió comercializar seis sabores diferentes, que van desde el tradicional jugo de manzana hasta la piña con coco y para no quedar fuera de la competencia, Jumex comercializa Jumex Soia y Herdez hizo lo mismo con la marca Soy Frut.
En las tiendas de autoservicio estos productos se encuentran en presentaciones de 200 mililitros y un litro; sus precios varían de tres pesos con 90 centavos a cuatro con 50 si se trata de la presentación individual; mientras que el litro cuesta entre 14 y 21 pesos.
Tan sólo las bebidas de la marca Soy Frut de Grupo Herdez, prevén que durante los próximos dos años el consumo de este producto crezca 20 por ciento, dijo Paulo Sierra, gerente de la marca.
Explicó que este crecimiento se debe a la tendencia de consumir “lo natural”, es decir, alimentos que ayuden a prevenir la obesidad y enfermedades cardiovasculares, situación que la empresa planea aprovechar para posicionarse dentro del mercado.
“Es una tendencia que cada vez se difunde más y que, poco a poco, con educación, se puede hacer que la gente conozca sus beneficios”, dijo.
Adela Pérez, consultora para nutrición humana y alimentos de la Asociación Americana de Soya, detalló que los mexicanos consumen soya aunque sea de forma no consciente, pues se encuentra en la elaboración de “muchos de los productos que se comercializan actualmente, como los chocolates”.
Agregó que la producción de este tipo de alimentos aumenta rápidamente y el
El creciente consumo de productos que ayudan al bienestar físico está empujando las ventas de las compañías; la leguminosa es una apuesta rentable
Las bebidas elaboradas a base de soya luchan por posicionarse en el mercado y aprovechar la ola de consumidores que buscan productos saludables, razón por la cual las empresas dedicadas a los alimentos y bebidas tienen una línea de productos para atacar este nicho.
Starbucks, por ejemplo, ya ofrece café con leche de soya cuyo precio promedio es de 33 pesos; Ades, de Unilever, tiene ocho presentaciones para sus bebidas; mientras Sigma lanzó al mercado la marca Solé, que cuenta con leche, jugos y bebidas de soya light.
Por su parte, Jugos del Valle decidió comercializar seis sabores diferentes, que van desde el tradicional jugo de manzana hasta la piña con coco y para no quedar fuera de la competencia, Jumex comercializa Jumex Soia y Herdez hizo lo mismo con la marca Soy Frut.
En las tiendas de autoservicio estos productos se encuentran en presentaciones de 200 mililitros y un litro; sus precios varían de tres pesos con 90 centavos a cuatro con 50 si se trata de la presentación individual; mientras que el litro cuesta entre 14 y 21 pesos.
Tan sólo las bebidas de la marca Soy Frut de Grupo Herdez, prevén que durante los próximos dos años el consumo de este producto crezca 20 por ciento, dijo Paulo Sierra, gerente de la marca.
Explicó que este crecimiento se debe a la tendencia de consumir “lo natural”, es decir, alimentos que ayuden a prevenir la obesidad y enfermedades cardiovasculares, situación que la empresa planea aprovechar para posicionarse dentro del mercado.
“Es una tendencia que cada vez se difunde más y que, poco a poco, con educación, se puede hacer que la gente conozca sus beneficios”, dijo.
Adela Pérez, consultora para nutrición humana y alimentos de la Asociación Americana de Soya, detalló que los mexicanos consumen soya aunque sea de forma no consciente, pues se encuentra en la elaboración de “muchos de los productos que se comercializan actualmente, como los chocolates”.
Agregó que la producción de este tipo de alimentos aumenta rápidamente y el valor de mercado se estima en 350 millones de dólares, por lo que se espera mantenga un crecimiento de entre 12 y 15 por ciento durante los próximos cinco años. “La producción se enfoca principalmente en productos de panadería, cereales, leche de soya y jugos”, aseguró la consultora de la Asociación Americana de Soya.
En cuanto a las bebidas de soya comentó que “el mercado en México está creciendo porque se ha confirmado su valor nutrimental y los beneficios que aporta a la salud”.
De acuerdo con la especialista la demanda del consumidor por alimentos funcionales va en aumento, al no tratarse de una moda sino de una microtendencia que se transforma y va ligada a la disponibilidad de estos productos en las tiendas.
“Hace tres o cuatro años existía una sola bebida de soya, antes era privativo de las tiendas naturistas, pero ahora el mercado ya es para todos”, detalló.
De acuerdo con el estudio Consumo de bebidas para una vida saludable: recomendaciones para la población mexicana, las bebidas representan la quinta parte de la energía que consumen los mexicanos.
El documento, elaborado por expertos de varias instituciones de salud en México, detalla que “la ingestión de energía proveniente de las bebidas representa 21 por ciento del consumo total de energía de adolescentes y adultos”.
Adela Pérez comentó que al comprar bebidas de soya o cualquier producto con esta leguminosa, debe observarse la etiqueta, pues aunque la soya aporta beneficios a la salud, deben considerarse el resto de los ingredientes, como la cantidad de azúcar o sal, para determinar si consumirlo es recomendable.
Starbucks, por ejemplo, ya ofrece café con leche de soya cuyo precio promedio es de 33 pesos; Ades, de Unilever, tiene ocho presentaciones para sus bebidas; mientras Sigma lanzó al mercado la marca Solé, que cuenta con leche, jugos y bebidas de soya light.
Por su parte, Jugos del Valle decidió comercializar seis sabores diferentes, que van desde el tradicional jugo de manzana hasta la piña con coco y para no quedar fuera de la competencia, Jumex comercializa Jumex Soia y Herdez hizo lo mismo con la marca Soy Frut.
En las tiendas de autoservicio estos productos se encuentran en presentaciones de 200 mililitros y un litro; sus precios varían de tres pesos con 90 centavos a cuatro con 50 si se trata de la presentación individual; mientras que el litro cuesta entre 14 y 21 pesos.
Tan sólo las bebidas de la marca Soy Frut de Grupo Herdez, prevén que durante los próximos dos años el consumo de este producto crezca 20 por ciento, dijo Paulo Sierra, gerente de la marca.
Explicó que este crecimiento se debe a la tendencia de consumir “lo natural”, es decir, alimentos que ayuden a prevenir la obesidad y enfermedades cardiovasculares, situación que la empresa planea aprovechar para posicionarse dentro del mercado.
“Es una tendencia que cada vez se difunde más y que, poco a poco, con educación, se puede hacer que la gente conozca sus beneficios”, dijo.
Adela Pérez, consultora para nutrición humana y alimentos de la Asociación Americana de Soya, detalló que los mexicanos consumen soya aunque sea de forma no consciente, pues se encuentra en la elaboración de “muchos de los productos que se comercializan actualmente, como los chocolates”.
Agregó que la producción de este tipo de alimentos aumenta rápidamente y el
El creciente consumo de productos que ayudan al bienestar físico está empujando las ventas de las compañías; la leguminosa es una apuesta rentable
Las bebidas elaboradas a base de soya luchan por posicionarse en el mercado y aprovechar la ola de consumidores que buscan productos saludables, razón por la cual las empresas dedicadas a los alimentos y bebidas tienen una línea de productos para atacar este nicho.
Starbucks, por ejemplo, ya ofrece café con leche de soya cuyo precio promedio es de 33 pesos; Ades, de Unilever, tiene ocho presentaciones para sus bebidas; mientras Sigma lanzó al mercado la marca Solé, que cuenta con leche, jugos y bebidas de soya light.
Por su parte, Jugos del Valle decidió comercializar seis sabores diferentes, que van desde el tradicional jugo de manzana hasta la piña con coco y para no quedar fuera de la competencia, Jumex comercializa Jumex Soia y Herdez hizo lo mismo con la marca Soy Frut.
En las tiendas de autoservicio estos productos se encuentran en presentaciones de 200 mililitros y un litro; sus precios varían de tres pesos con 90 centavos a cuatro con 50 si se trata de la presentación individual; mientras que el litro cuesta entre 14 y 21 pesos.
Tan sólo las bebidas de la marca Soy Frut de Grupo Herdez, prevén que durante los próximos dos años el consumo de este producto crezca 20 por ciento, dijo Paulo Sierra, gerente de la marca.
Explicó que este crecimiento se debe a la tendencia de consumir “lo natural”, es decir, alimentos que ayuden a prevenir la obesidad y enfermedades cardiovasculares, situación que la empresa planea aprovechar para posicionarse dentro del mercado.
“Es una tendencia que cada vez se difunde más y que, poco a poco, con educación, se puede hacer que la gente conozca sus beneficios”, dijo.
Adela Pérez, consultora para nutrición humana y alimentos de la Asociación Americana de Soya, detalló que los mexicanos consumen soya aunque sea de forma no consciente, pues se encuentra en la elaboración de “muchos de los productos que se comercializan actualmente, como los chocolates”.
Agregó que la producción de este tipo de alimentos aumenta rápidamente y el valor de mercado se estima en 350 millones de dólares, por lo que se espera mantenga un crecimiento de entre 12 y 15 por ciento durante los próximos cinco años. “La producción se enfoca principalmente en productos de panadería, cereales, leche de soya y jugos”, aseguró la consultora de la Asociación Americana de Soya.
En cuanto a las bebidas de soya comentó que “el mercado en México está creciendo porque se ha confirmado su valor nutrimental y los beneficios que aporta a la salud”.
De acuerdo con la especialista la demanda del consumidor por alimentos funcionales va en aumento, al no tratarse de una moda sino de una microtendencia que se transforma y va ligada a la disponibilidad de estos productos en las tiendas.
“Hace tres o cuatro años existía una sola bebida de soya, antes era privativo de las tiendas naturistas, pero ahora el mercado ya es para todos”, detalló.
De acuerdo con el estudio Consumo de bebidas para una vida saludable: recomendaciones para la población mexicana, las bebidas representan la quinta parte de la energía que consumen los mexicanos.
El documento, elaborado por expertos de varias instituciones de salud en México, detalla que “la ingestión de energía proveniente de las bebidas representa 21 por ciento del consumo total de energía de adolescentes y adultos”.
Adela Pérez comentó que al comprar bebidas de soya o cualquier producto con esta leguminosa, debe observarse la etiqueta, pues aunque la soya aporta beneficios a la salud, deben considerarse el resto de los ingredientes, como la cantidad de azúcar o sal, para determinar si consumirlo es recomendable.
Fuente:
Exonline
21 de Abril de 2008
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