Ciudad de México— ¡Estamos en verano! Y esta es la época del año en la que disfrutamos más del sol y padecemos más las lluvias. Es entonces también momento de tomar precauciones extras para que la piel y el cabello no resulten dañados en esta temporada de extremos. Debido a que muchos aprovechan para tomar vacaciones, es importante considerar que la combinación de calor y humedad afecta la hidratación cutánea y capilar. Objetivo: proteger e hidratar Ahora es cuando se antoja tirarse al sol para obtener un sexy tono dorado; sin embargo, la mayoría de las veces sólo se consigue maltratar la piel. Para obtener los beneficios que los rayos solares brindan al organismo bastan 10 minutos de exposición, más allá de ese tiempo, se provocan daños en las capas superficiales y profundas de la piel. Para evitarlo, se debe aplicar protección solar antes de exponerse y reaplicarla cada dos o cuatro horas, según el producto. También en esta temporada la piel pierde humedad más rápido de lo que puede recuperarla. La resequedad y la tirantez se pueden combatir con dos sencillas acciones: en primer lugar, nunca olvidar aplicar una crema hidratante por la mañana y por la noche. Además, se puede recurrir a un spray pulverizador de agua rica en oligoelementos para refrescarse en cualquier momento. Por otro lado, el cuero cabelludo y el cabello también se deshidratan. Para protegerlos usa champús con filtro solar. Si lo tienes teñido, cúbrelo para evitar que se altere el color. Piel de porcelana El buen clima invita a usar prendas ligeras y frescas, para lo cual la piel debe lucir perfecta. Los productos exfoliantes resultan grandes aliados para lograrlo. Se recomienda usar productos suaves, que no rasguen ni lastimen la epidermis. Aplica una generosa cantidad y extiéndela con movimientos circulares; utiliza un producto ligeramente más abrasivo en codos, rodillas y talones. Al finalizar, enjuaga perfectamente para eliminar todo el producto y luego usa tu crema hidratante. Si te bronceaste, no te exfolies en unas semanas, de lo contrario, tu nuevo tono desaparecerá rápidamente. Si no te gusta el sol pero sí el color dorado, recurre a los autobronceadores o a los aceites que te aporten brillo.
Fuente:
El Diario Digital
8 de Julio de 2008
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