IMAGEN FEMENINA
El 89% de las madres suele perder su espacio personal
Se descuidan a sí mismas y se olvidan del espejo. Muchas mujeres se ven tan absorbidas por su tarea de ser madres que en su mundo pareciera no entrar más que ella y su pequeño hijo. Los riesgos. El aumento excesivo de peso causa las antiestéticas estrías y da lugar a la aparición de celulitis. El control médico es fundamental para evitarlas.
UN MUNDO SOLO PARA DOS. Muchas mujeres pierden interés por todo lo que no se relacione con su bebé.
Imagen femenina: un modelo para armar
Celulitis, várices, hiperpigmentaciones y manchas son algunas de las secuelas de los embarazos. Pero no a todas las mujeres parece preocuparles. Según una reciente encuesta realizada por la marca Suave, de Helena Curtis, el 89% de las madres admite que descuidó su imagen personal. Mujeres trabajadoras y amas de casa, de entre 25 y 40 años, con por lo menos dos hijos de entre 3 y 9 años -según el estudio-, sienten que les falta un espacio personal ya sea para la vida en pareja, la vida social, o para comprarse ropa y accesorios y para verse lindas. “No hay tiempo”, responden. “No hay dinero”, contestan otras. La psicóloga Gabriela Abad reconoce que la maternidad absorbe enteramente a muchas mujeres, que descuidan su parte femenina. “No sólo se olvidan de sí mismas, sino también de sus maridos, porque centran toda su atención en un solo lugar que es la maternidad. Esto puede traer como consecuencia problemas matrimoniales, por lo que es necesario buscar un equilibrio”. Muchas de estas mamás se plantean a diario la dicotomía entre “ser una buena madre” y “dedicarse tiempo a sí mismas” vivenciando obligaciones y presiones que impiden que puedan dedicar tiempo a su cuidado personal. Sin embargo, entienden que cuando una madre se gusta a sí misma, se quiere y se cuida, es una madre feliz, que se siente bien e irradia energía positiva para toda su familia. Valorando este concepto, la firma presentó su comercial “Decile sí a la belleza" .El spot muestra, a través del humor, que el 89 % de las madres admite que se dejó estar durante el puerperio y la crianza de los chicos, pero que el 100 % está a tiempo de recuperarse, para cuidarse, verse a sí misma mejor y reflejar ese bienestar en sus hijos. El estudio se realizó en mayo de 2006 entre mujeres de 25 a 40 años, con dos hijos de entre 3 y 9 años, trabajadoras y amas de casa.
El rol de ser mamá (y nada más) está desvalorizado en la sociedad actual. La maternidad es vivida como una de las realizaciones personales más importantes y gratificantes de la vida. Sin embargo muchas admiten que este sentimiento les genera emociones ambivalentes: por un lado, de amor incondicional hacia sus hijos e ilusión de sentirse completas; y por el otro lado, la falta de reconocimiento que realizan como madres y la postergación de los proyectos personales, observa el trabajo realizado por la firma Suave, de Helena Curtis. Cecilia Absatz, periodista y escritora, especialista en temas de género, y Laura Gutman, psicóloga, especialista en familia y maternidad, coinciden en que el rol de la maternidad se encuentra desvalorizado, ya que presenta una fuerte exigencia social hacia el crecimiento económico y personal, y hacia la conservación de un cuerpo casi adolescente.“Hace dos generaciones, cuando la mujer no trabajaba, el lugar de la maternidad era un lugar valuado, entonces la mujer era mujer en el momento en que era madre. Hoy en día, el lugar de la madre esta devaluado y para “ser” hay que ser otra cosa, (profesional, estudiante, exitosa)” comenta Laura Gutman. Hay una dicotomía entre la independencia económica y la entrega a los otros, y un mayor conflicto entre la vida personal y la crianza de los hijos, advierten. Coinciden en afirmar que “si bien durante el embarazo la mujer se siente en su momento de mayor “luz” porque se siente completa y potenciada, es en el momento del puerperio y la crianza, cuando la mujer prioriza las necesidades de su hijo, sufriendo una profunda despersonalización y desestructuración de la idea que ella tenía de su propia vida”. En este período, sus hijos pasan a ocupar el primer plano de sus preocupaciones, sólo después recobran el equilibrio.
Hay que cuidar la belleza en el embarazo. Durante el embarazo se produce una serie de cambios en el cuerpo de la mujer que tienen que ver con los cambios hormonales por la presencia del bebé dentro del vientre materno. La estética corporal se ve amenazada pero cada embarazada puede, de alguna manera, frenar o al menos disminuir esos problemas:
1) Celulitis: durante esta etapa, hay una alteración en el drenaje linfático y venoso. Para evitarlos es necesario: una dieta con alto contenido en fibras y bajo contenido en grasas y en sodio, con presencia de cereales, vegetales de hojas verdes y soja. Beber mucho líquido, no fumar y hacer ejercicios.El drenaje linfático manual mejora mucho la circulación linfática y disminuye la aparición y sintomatología de la celulitis.
2) Estrías: son lesiones cicatrizales que se producen en la piel como consecuencia de ruptura de fibras elásticas. Las cicatrices nunca desaparecen, sólo puede mejorarse su apariencia. Por eso lo más importante es su prevención. Como medida fundamental debe controlarse la dieta para evitar cambios bruscos y exagerados de peso. Además se deberá mantener la piel hidratada utilizando cremas con alto contenido en vitamina A.
3) Várices: es una alteración en el drenaje venoso provocado por el aumento de peso, la disminución en la actividad muscular y la compresión de venas pélvicas.
Fuente:
La Gaceta
21 de Junio de 2007
http://www.lagaceta.com.ar/vernotae.asp?id_nota=223150
El 89% de las madres suele perder su espacio personal
Se descuidan a sí mismas y se olvidan del espejo. Muchas mujeres se ven tan absorbidas por su tarea de ser madres que en su mundo pareciera no entrar más que ella y su pequeño hijo. Los riesgos. El aumento excesivo de peso causa las antiestéticas estrías y da lugar a la aparición de celulitis. El control médico es fundamental para evitarlas.
UN MUNDO SOLO PARA DOS. Muchas mujeres pierden interés por todo lo que no se relacione con su bebé.
Imagen femenina: un modelo para armar
Celulitis, várices, hiperpigmentaciones y manchas son algunas de las secuelas de los embarazos. Pero no a todas las mujeres parece preocuparles. Según una reciente encuesta realizada por la marca Suave, de Helena Curtis, el 89% de las madres admite que descuidó su imagen personal. Mujeres trabajadoras y amas de casa, de entre 25 y 40 años, con por lo menos dos hijos de entre 3 y 9 años -según el estudio-, sienten que les falta un espacio personal ya sea para la vida en pareja, la vida social, o para comprarse ropa y accesorios y para verse lindas. “No hay tiempo”, responden. “No hay dinero”, contestan otras. La psicóloga Gabriela Abad reconoce que la maternidad absorbe enteramente a muchas mujeres, que descuidan su parte femenina. “No sólo se olvidan de sí mismas, sino también de sus maridos, porque centran toda su atención en un solo lugar que es la maternidad. Esto puede traer como consecuencia problemas matrimoniales, por lo que es necesario buscar un equilibrio”. Muchas de estas mamás se plantean a diario la dicotomía entre “ser una buena madre” y “dedicarse tiempo a sí mismas” vivenciando obligaciones y presiones que impiden que puedan dedicar tiempo a su cuidado personal. Sin embargo, entienden que cuando una madre se gusta a sí misma, se quiere y se cuida, es una madre feliz, que se siente bien e irradia energía positiva para toda su familia. Valorando este concepto, la firma presentó su comercial “Decile sí a la belleza" .El spot muestra, a través del humor, que el 89 % de las madres admite que se dejó estar durante el puerperio y la crianza de los chicos, pero que el 100 % está a tiempo de recuperarse, para cuidarse, verse a sí misma mejor y reflejar ese bienestar en sus hijos. El estudio se realizó en mayo de 2006 entre mujeres de 25 a 40 años, con dos hijos de entre 3 y 9 años, trabajadoras y amas de casa.
El rol de ser mamá (y nada más) está desvalorizado en la sociedad actual. La maternidad es vivida como una de las realizaciones personales más importantes y gratificantes de la vida. Sin embargo muchas admiten que este sentimiento les genera emociones ambivalentes: por un lado, de amor incondicional hacia sus hijos e ilusión de sentirse completas; y por el otro lado, la falta de reconocimiento que realizan como madres y la postergación de los proyectos personales, observa el trabajo realizado por la firma Suave, de Helena Curtis. Cecilia Absatz, periodista y escritora, especialista en temas de género, y Laura Gutman, psicóloga, especialista en familia y maternidad, coinciden en que el rol de la maternidad se encuentra desvalorizado, ya que presenta una fuerte exigencia social hacia el crecimiento económico y personal, y hacia la conservación de un cuerpo casi adolescente.“Hace dos generaciones, cuando la mujer no trabajaba, el lugar de la maternidad era un lugar valuado, entonces la mujer era mujer en el momento en que era madre. Hoy en día, el lugar de la madre esta devaluado y para “ser” hay que ser otra cosa, (profesional, estudiante, exitosa)” comenta Laura Gutman. Hay una dicotomía entre la independencia económica y la entrega a los otros, y un mayor conflicto entre la vida personal y la crianza de los hijos, advierten. Coinciden en afirmar que “si bien durante el embarazo la mujer se siente en su momento de mayor “luz” porque se siente completa y potenciada, es en el momento del puerperio y la crianza, cuando la mujer prioriza las necesidades de su hijo, sufriendo una profunda despersonalización y desestructuración de la idea que ella tenía de su propia vida”. En este período, sus hijos pasan a ocupar el primer plano de sus preocupaciones, sólo después recobran el equilibrio.
Hay que cuidar la belleza en el embarazo. Durante el embarazo se produce una serie de cambios en el cuerpo de la mujer que tienen que ver con los cambios hormonales por la presencia del bebé dentro del vientre materno. La estética corporal se ve amenazada pero cada embarazada puede, de alguna manera, frenar o al menos disminuir esos problemas:
1) Celulitis: durante esta etapa, hay una alteración en el drenaje linfático y venoso. Para evitarlos es necesario: una dieta con alto contenido en fibras y bajo contenido en grasas y en sodio, con presencia de cereales, vegetales de hojas verdes y soja. Beber mucho líquido, no fumar y hacer ejercicios.El drenaje linfático manual mejora mucho la circulación linfática y disminuye la aparición y sintomatología de la celulitis.
2) Estrías: son lesiones cicatrizales que se producen en la piel como consecuencia de ruptura de fibras elásticas. Las cicatrices nunca desaparecen, sólo puede mejorarse su apariencia. Por eso lo más importante es su prevención. Como medida fundamental debe controlarse la dieta para evitar cambios bruscos y exagerados de peso. Además se deberá mantener la piel hidratada utilizando cremas con alto contenido en vitamina A.
3) Várices: es una alteración en el drenaje venoso provocado por el aumento de peso, la disminución en la actividad muscular y la compresión de venas pélvicas.
Fuente:
La Gaceta
21 de Junio de 2007
http://www.lagaceta.com.ar/vernotae.asp?id_nota=223150
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